PROGRAMA SEMANA DE LA CIENCIA (DEL 13 AL 17 DE NOVIEMBRE)
1. Exposiciones en el hall y pasillos del IES
a. Exposición “El Conocimiento del Universo” llevada a cabo por alumnos de 4º ESO del IES Maestro Haedo (Zamora) y organizado en nuestro centro por Dep. Física y Química.
b. Exposición de fósiles (Paleozoico, Mesozoico y Cenozoico) del laboratorio, llevada a cabo por alumnos de Cultura Científica de B1A y B1B. Dep. Biología y Geología
c. Vídeos sobre la Historia Geológica de la Tierra realizados por los alumnos de Cultura Científica de B1A y B1B. Dep. Biología y Geología
d. Posters TODO ES CIENCIA, Dep. Biología y Geología
2. Los Talleres de "Descubriendo al Desmán Ibérico"
y "Los ecosistemas acuáticos en Castilla y León" serán impartidos por Lara Naves y Manuel Díaz, Máster en Biología de la Conservación - Casa del Parque Natural de Babia y Luna. Dep. Biología y Geología.
3. Lámpara de ADNs de los alumnos de 4B. Dep. de Tecnología y Dep. Biología y Geología.
4. Prácticas diversas en el hall durante los recreos de la semana, llevadas a cabo por alumnos voluntarios de 4º ESO y 1º Bach.
5. “Sciencie fun fair” 3ºESO Sección Bilingüe en Inglés. Talleres.
Una casa en San Vicente do Mar, en pleno O Grove, fue escenario anoche de un incendio en O Grove que destrozó por completo la cocina. Las llamas se iniciaron en la campana extractora sobre las 22:30, extendiéndose con rapidez por los muebles cercanos. El humo y el calor desorientaron a los dueños, que intentaron controlar la situación como pudieron.
Lo que evitó una tragedia mayor fue que los propietarios actuaron rápido y usaron un extintor ABC para contener el fuego. Gracias a eso, las llamas no se extendieron a otras habitaciones. Aun así, la cocina quedó totalmente quemada: electrodomésticos calcinados, muebles hechos ceniza y un fuerte olor a quemado que seguía en el ambiente horas después.
Al lugar acudieron bomberos de Emerxencias O Grove y la Guardia Civil. Revisaron todo para asegurarse de que no quedaran focos activos. No hubo heridos, pero el susto fue fuerte. Se investiga si el fuego empezó por un fallo eléctrico o por grasa acumulada. Los equipos recomendaron contar con un extintor CO2 en zonas como la cocina, donde hay riesgo por aparatos eléctricos. La familia ahora intenta recuperarse del golpe y reparar lo perdido.
En el crisol ardiente de la construcción moderna, la seguridad es el pilar que sostiene cualquier proyecto que aspire a perdurar. La lana de roca ignífuga emerge como una heroína silenciosa, esa barrera infranqueable que se interpone entre el acero y la amenaza voraz del fuego. En España, donde las normativas de seguridad se endurecen y la prevención se convierte en mandato, esta solución no solo es un recurso, sino una necesidad impostergable.
Fabricada a partir de roca volcánica, generalmente basalto, la lana de roca ignífuga se crea al fundir esta materia prima a temperaturas extremas para transformarla en finas fibras resistentes al fuego. El resultado: un material que no solo soporta temperaturas superiores a 1.000 °C sin degradarse, sino que también ofrece un aislamiento térmico y acústico excepcional.
Sus propiedades la convierten en un aliado imprescindible para proteger estructuras metálicas, especialmente el acero, que, como sabemos, es vulnerable al calor extremo y puede perder rápidamente su resistencia durante un incendio.
Gracias a estas cualidades, la lana de roca se posiciona como el estándar en ignifugaciones, especialmente para reforzar y proteger los esqueletos metálicos en los edificios más exigentes.
El acero es el alma estructural de muchos edificios, pero su talón de Aquiles es el calor. Al alcanzar los 550 °C, el acero puede perder hasta la mitad de su resistencia mecánica, y a los 1.000 °C, su capacidad estructural puede quedar prácticamente anulada, lo que se traduce en colapsos catastróficos. Aquí es donde la lana de roca ignífuga desempeña un papel vital, retardando el calentamiento y ofreciendo un margen de tiempo invaluable para la evacuación y actuación de emergencias.
En la práctica, esta protección se aplica en áreas como:
Por eso, la demanda de ignifugaciones Barcelona y otras grandes ciudades españolas ha experimentado un auge considerable, dada la importancia de salvaguardar tanto vidas como patrimonio.
La aplicación de lana de roca ignífuga exige un procedimiento meticuloso y la intervención de profesionales con experiencia. Veamos el proceso paso a paso:
Más allá de su función básica, la lana de roca aporta múltiples ventajas que incrementan su valor como material de protección pasiva contra incendios. Para profundizar en esto, puede consultarse este recurso especializado en protección pasiva contra incendios.
La lana de roca es un material técnico que requiere de aplicación especializada para garantizar su efectividad. Un trabajo mal ejecutado puede comprometer seriamente la seguridad. Por ello, confiar en profesionales con experiencia en ignifugaciones es esencial. Los beneficios son evidentes:
La lana de roca ignífuga es mucho más que un aislante; es la defensa primordial para estructuras metálicas que demandan una protección fiable frente al fuego. En un contexto donde la seguridad y la legislación imponen condiciones cada vez más estrictas, este material se erige como la elección inteligente para constructores, arquitectos e ingenieros que no quieren dejar nada al azar.
En España, la conjunción de normativas exigentes, el incremento de edificaciones metálicas y la concienciación social sobre prevención hacen que el uso de la lana de roca ignífuga sea, sin duda, una decisión estratégica para garantizar la seguridad y el valor de cualquier inmueble.
Si desea asegurar la integridad de sus estructuras y cumplir con las más altas exigencias en protección contra incendios, contar con profesionales especializados en ignifugaciones es el camino que no admite atajos. Porque la seguridad, al final del día, es el verdadero patrimonio que todos debemos proteger.